Eficiencia energética, Casas Pasivas y Bioconstrucción

Se denominan CASAS PASIVAS a la construcciones diseñadas para garantizar la eficiencia energética y el ahorro en el hogar. Están construidas con una serie de características arquitectónicas especiales que garantizan un mayor confort en la vivienda con la menor demanda de energía posible.

Casas capaces de AUTOABASTECERSE gracias a la energía que producen a través de: Placas solares, energías renovables, un correcto aislamiento evitando la pérdida de calor y la entrada de frío y humedad y los adecuados materiales de construcción.

Realmente sí que existe un incremento del precio total, si comparamos los dos tipos de construcción, que puede ir desde un 2% hasta un 15%, dependiendo de la ubicación y la orientación entre otros factores.

La Casas Pasivas suponen unos centímetros más de aislamiento en la envolvente, la instalación de un sistema de ventilación y unas ventanas de triple vidrio. Pero esto NO significa un aumento de precio tan alto, ya que realmente se trata de una inversión que repercute en el ahorro de los consumos y las facturas del hogar.

Como hemos visto, la finalidad de una casa pasiva es conseguir el máximo confort en al vivienda reduciendo el consumo energético y a la vez el ahorro en los gastos de nuestras facturas. ¿Suena bien, verdad?

Si pensamos que estamos gastando 9 veces menos en energía al año, ese incremento inicial del precio se ve amortizado.

Estamos hablando de una vivienda con un alto nivel de confort debido a la ausencia de ruidos, condensaciones, humedades, polvo, ácaros y otros factores que afectan directamente a la salud.

Una nueva normativa dice que desde el 2021, todos los edificios del continente deben estar construidos bajo la denominación de Edificio de Energía Casi Nula, que tiene unas características muy similares a las casas pasivas.

En Almacenes Lavín te asesoramos acerca de los mejores materiales para realizar tu proyecto de mejora en el eficiencia de tu hogar o construcción.

Diferencias entre vivienda pasiva vs vivienda tradicional

Consumo energético 9 veces menor que la vivienda tradicional.

Sin pérdida de calor, sin olores y sin ruidos del exterior.

Muros sin filtraciones de aire, agua o partículas contaminadas.

Microclima constante en cualquier época del año.